La compleja situación laboral en España se refleja en las casi 2,7 millones de personas que se encuentran en desempleo involuntario, entre los cuales hay un alto porcentaje de población migrante residente legal.
Aunque aproximadamente dos terceras partes de los desempleados reciben algún tipo de prestación o ayuda del SEPE, muchos no logran acceder a estas por no cumplir con todos los requisitos o al tener una situación de residencia irregular.
Es en estos casos donde existen alternativas al alcance de los colectivos más vulnerables, que funcionan como última red de seguridad para evitar situaciones de pobreza extrema. Se trata de subsidios y ayudas extraordinarias que analizaremos a continuación. Toma nota, guarda y comparte este artículo a quien le pueda interesar.
Subsidio para mayores de 45 años sin cargas familiares
Uno de los subsidios extraordinarios se creó pensando en trabajadores de más de 45 años que perdieran su trabajo y no tuvieran responsabilidades familiares directas ni menores bajo su cargo. Para optar a esta ayuda es necesario demostrar la situación de desempleo tras agotar una prestación contributiva previa.
Su duración es de 6 meses, con opción a prórroga si persiste la falta de oportunidades laborales. La cuantía ascendía en 2023 a 480 euros mensuales, una cantidad que permite cubrir necesidades básicas mientras se busca activamente empleo.
Renta Mínima de Inserción hasta los 65 años
Otra alternativa es la Renta Mínima de Inserción, que también tiene como destinatarios a personas en edad activa, en este caso menores de 65 años. A diferencia del subsidio anterior, el requisito aquí es encontrarse por debajo del umbral de pobreza, más que en desempleo prolongado.
Se trata de una ayuda temporal por un periodo máximo de 11 meses, tiempo en el que se trabaja intensamente en programas de reinserción laboral con los beneficiarios.
Subsidios para desempleados mayores de 52 años
Los trabajadores de mayor edad también cuentan con apoyos orientados a su situación. Existe un subsidio específico para desempleados que hayan cumplido 52 años y hayan agotado el paro. Funciona como sustento económico hasta que se cumpla la edad de jubilación ordinaria.
La cuantía es de 480 euros mensuales y su concesión se revisa periódicamente para valorar la evolución de cada caso.
Ingreso Mínimo Vital para hogares sin recursos
El Ingreso Mínimo Vital es otra red que evita caer en la miseria absoluta a aquellas familias que han perdido toda fuente de recursos económicos. Dependiendo de los miembros a cargo, la cuantía para 2023 iba de los 600 a los 784 euros mensuales.
No es una prestación indefinida, sino temporal, mientras se trabaja en programas personalizados de inserción y se cumplan el resto de requisitos.
Ayuda Familiar de 30 meses para parados de larga duración
Por último, la Ayuda Familiar se otorga tras agotar la prestación contributiva por desempleo y en casos de especial vulnerabilidad con hijos menores a cargo. Está pensada como periodo de transición con una duración de 6 meses, prorrogables hasta un total de 30 meses.
La cuantía de esta ayuda se sitúa actualmente en 480 euros mensuales. Junto con el apoyo económico, se refuerza la orientación laboral y la formación durante ese periodo.
La protección por desempleo debe ampliarse a toda la población vulnerable
Resulta esencial mantener y reforzar este tipo de ayudas extraordinarias para proteger a los colectivos más golpeados por el desempleo involuntario, evitando que caigan en espirales de miseria. Estas medidas deberían ampliarse a toda la población vulnerable, como la población migrante en situación irregular, que siempre queda totalmente desprotegida.
Y es que los migrantes indocumentados sufren situaciones extremas de precariedad y vulnerabilidad. Al carecer de permiso de residencia y trabajo, deben aceptar empleos informales en condiciones de explotación, sin derechos ni protección social. Esto se traduce en salarios míseros, abusos por parte de empleadores inescrupulosos, jornadas interminables y ningún tipo de prestación en caso de perder ese sustento.
Es una responsabilidad colectiva defender e impulsar políticas públicas solidarias, que apoyen a quienes más lo necesitan en los momentos más difíciles, sin importar su origen o situación administrativa. La sociedad debe avanzar conjuntamente sin dejar atrás a ninguno de sus miembros.
Fuente: https://www.epe.es/
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