En La Puebla de Híjar (Teruel), un profesor de un taller de empleo fue condenado a un año y medio de prisión por abuso sexual a una alumna de origen peruano. El hombre fue sentenciado por haber manoseado a la víctima por encima de su ropa e incluso darle una palmada en la nalga.
El delito ocurrió en julio de 2021 y la sentencia acaba de ser hecha pública por el Juzgado de lo Penal de Teruel. Además de la condena de prisión, el profesor fue inhabilitado durante seis meses para cualquier profesión relacionada con la docencia y se le prohibió acercarse o comunicarse con la víctima durante dos años, además de tener que indemnizarla con 6,000 euros en concepto de responsabilidad civil.
Este caso es un ejemplo de la importancia de denunciar las agresiones sexuales. La víctima sufrió un calvario y estrés postraumático tras la agresión. Finalmente decidió denunciar y buscar justicia.
Es importante destacar que el delito fue juzgado conforme a la legislación anterior a la ley del solo sí es sí, y por eso la condena fue por abuso sexual y no agresión sexual, que es como la ley tipifica todos los delitos sexuales ahora. De haberse aplicado la nueva ley, el agresor hubiera tenido una condena más contundente.
Es importante que las víctimas de agresiones sexuales sepan que no están solas y que deben denunciar. La costumbre de guardar silencio ante este tipo de delitos debe ser desterrada, y es fundamental que sepan que cuentan con el apoyo de la sociedad y las autoridades competentes. La justicia debe ser ágil y contundente para que los agresores reciban una condena ejemplar y se sienta una verdadera protección para las víctimas.
En el caso del profesor de La Puebla de Híjar, la sentencia reconoce que hubo abuso sexual y que la víctima sufrió un trastorno de ansiedad generalizado. La víctima aseguró que ha sufrido una gran “ansiedad” y una “tensión horrible” y considera que ha sufrido una doble discriminación, “por ser mujer y racial”, ya que es inmigrante peruana. Por eso, es fundamental que se promueva una cultura de denuncia y se apoye a todas las víctimas sin importar su origen o género.
La ley del solo sí es sí es un avance importante en la lucha contra las agresiones sexuales, ya que establece que cualquier actividad sexual sin consentimiento expreso es una agresión sexual. Esto significa que el consentimiento debe ser claro y expreso, y que cualquier situación en la que no se dé este consentimiento es una agresión. Esta ley busca proteger especialmente a las víctimas de violencia sexual y promover una cultura de respeto y consentimiento.
FUENTE:
https://www.diariodeteruel.es/
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