¿QUÉ MEDIDAS DEBERÍA TENER UNA LEY CONTRA EL RACISMO?
Ha dado inicio el proceso de elaboración de una Ley contra el racismo y ahora se encuentra en período de consulta pública, cuyo plazo finaliza el martes 10 de mayo.
Ha dado inicio el proceso de elaboración de una Ley contra el racismo y ahora se encuentra en período de consulta pública, cuyo plazo finaliza el martes 10 de mayo.
Un reciente estudio del Ministerio de Igualdad arroja que el 51,8% de las personas entrevistadas manifiestan haber sufrido racismo en situaciones tales como trato despectivo, insultos, violencia verbal, discriminación en el ámbito laboral o de la vivienda, marginación y exclusión social. Sin embargo el 81,2% no ha denunciado.
Una treintena de colectivos denuncian que en 2021 agentes de los cuerpos policiales en Navarra realizaron centenares de “citas trampa” a personas migrantes con el el fin de iniciar un expediente de expulsión, así como la existencia de controles racistas.
El acuerdo de Ayuso incluye varios de los grandes mantras de Vox contra los menores inmigrantes no acompañados, la “okupacion” y las “bandas latinas”, a quienes pone en su mira directamente.
El ciudadano, como exige la ley, es español, pero la acusada consideró, al llamarse Alí Mohamed, que no iba a entender bien la lengua y “podía dar problemas”.
En este vídeo, utilizando el símil de un volcán, vamos a profundizar en el análisis de las señales del odio y del racismo estructural para tratar de entender cómo se conectan, se arraigan y están estrechamente vinculadas con la práctica política, mediática, institucional y social, más allá de los bulos y manifestaciones de odio xenófobas explícitas.
No solo denuncian que Interior incumple sus obligaciones a la hora de garantizar el acceso a la justicia, sino que además “está permitiendo los abusos, la explotación, la violación de derechos y la violencia”
#PoderMigrante
La agitación del odio al migrante impulsa el uso de la tecnología y violencia contra los refugiados. Para 2021-2027 la UE destina 34.900 millones de euros a la gestión de fronteras, mientras deja en un segundo plano la creación de pasajes seguros y procesos de asilo justos.
La gran mayoría de mujeres migradas Trabajadoras del hogar y Cuidadoras afrontan una situación de vulnerabilidad laboral y económica extrema por la invisibilidad y la falta de voluntad política por mejorar su condiciones laborales.
La autora reflexiona sobre ‘¿Por qué no hablo con blancos de racismo?’ y ‘¿Acaso no soy yo una mujer?’, lecturas fundamentales para entender mejor la negritud y el privilegio blanco.